jueves, 7 de noviembre de 2013

El mal de cada mes




Quiero aclarar en la primera línea que estos son mis sentimientos en una etapa sensible, femeninamente hablando. Insisto mis sentimientos y los de nadie más.


Siento que voy a reventar, estoy sentada frente al computador me miro y me siento gorda, bueno es que realmente lo estoy, es evidente mi sobre peso, a pesar de que los mentirosos engrupidores se empecinen en mentirme en la cara.  Me siento fea, si además de gorda soy fea, aunque hay días que me siento guapa, pero hoy no es uno de esos. Trato de no verme en el espejo porque de inmediato me baja una depresión express que manda lejos la idea de que alguna vez  tendré hijos, tendré familia o  que volveré a tener sexo. Aunque reflexiono por algunos minutos y  pienso que tal vez tan fea no sea, hay gente que me piropea, pero definitivamente son todos mentirosos, nadie me ha querido de verdad (nadie mas allá de mi abuelita) y es por eso que estoy sola. Pero quizás la culpa no sea de los demás, quizás sea sea mi culpa: mi gordura, mi fealdad y de yapa mi personalidad. Soy extrovertida y un tanto alocada, y hay hombre que no les gusta ese tipo de mujeres, de hecho se sienten intimidados por mujeres como yo, ahora que lo pienso podría cambiar mi forma de ser, convertirme en una mujer mas tranquila, tal vez un poco mas dama algo así como el prototipo de la buena mujer digna de ser convertida en esposa. ¿Que mierda estoy diciendo? ¿Tener que cambiar para ser querida? Siendo como soy  fui amada, tuve a alguien que me amo mucho y otro que bueno, mejor no recordarlo (feo culiado). Pero volví al problema: estoy sola, soy fea, gorda, loca y además resfriada ¿Hay algo más feo que una vaca loca con sobre peso productora de mocos? Lo dudo. ¡Que es terrible mi vida! Por lo menos antes tenia un buen empleo que de alguna manera me hacia un buen partido, apta para ser presentada en algún almuerzo familiar, ahora ni eso tengo. Entonces ¿Qué tengo de bueno? Me cuesta responder por algunos segundos, pero de inmediato me doy cuenta que tengo una cabeza que como mínimo es capaz de cuestionarse cosas triviales como el hecho de estar soltera, ser gorda o ser fea, y que también es lo suficientemente inteligente para darse cuenta que todo lo anterior es pura basura pre-menstrual causada por los clásicos cambios hormonales que llegan a este cuerpo una vez al mes solo por ser mujer. Realmente no soy gorda, me siento así debido a la combinación de mi hinchazón y de unos kilitos demás producto de mi amor por la comida, tan fea no soy y mi personalidad es la de una persona feliz que finalmente se da cuenta que tiene una vida bastante buena que incluso le da tiempo para pensar en estupideces. 

2 comentarios: